¡¡Los Cupcakes NO son Magdalenas!!
¡Lo entendemos! La repostería creativa acaba de llegar a España y hasta hace nada nos era prácticamente imposible siquiera encontrar las herramientas e ingredientes necesarios para elaborar estos postres de origen Americano.
No es la primera vez que escuchamos expresiones tales como:
-¿Cupcakes para su cumpleaños? No, no le gustan las magdalenas...
-¿Tanto precio por unas magdalenas decoradas?
-¡Mira que magdalenas más curradas! Ya no saben ni que inventar.
-Pues por 1€ tengo una bolsa de 12 magdalenas en el super...
Pero... ¿Es cierto que los cupcakes son tan sólo magdalenas decoradas?
¡Nada más lejos de la realidad! A continuación os detallamos 5 motivos por los que los cupcakes NO son magdalenas.
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1- SU PROPIO NOMBRE
El nombre "cupcake" viene de la combinación de las palabras "cup" taza, y "cake" tarta, es decir "Tarta en taza".
Magdalena en inglés se dice como "Madeleine" o incluso referirnos a ellas como "muffin" estaría aceptado.
2- ORIGEN DEL CUPCAKE
Los cupcakes parten de un origen humilde, ya que en el libro "American Cookery" en 1796 Amelia Simmons recogió una receta de un tipo de tarta pequeña que podía hornearse en una taza, con la particularidad de que su cocción resultaba mucho más rápida y además, resultaba mucho más económico realizarla. Por este particular método de horneado en taza nació el nombre que hemos comentado anteriormente de "CupCake".
No es hasta el siglo XX que comenzaron a distribuirse moldes que facilitaban la elaboración de este postre, por lo que los cupcakes comenzaron a convertirse en un postre imprescindible en cumpleaños y eventos importantes.
Además, la aparición de estos postres en la conocidísima serie "Sexo en Nueva York" ayudó a que estas particulares mini-tartas fuesen conocidas en todo el mundo.
3- FISIONOMÍA DEL CUPCAKE
Ya hemos analizado su nombre y su origen, como es lógico pensar, los cupcakes también tienen muchas diferencias de elaboración en comparación con las magdalenas.
Una de las más evidentes es que en su compuesto principal una magdalena se compone de aceite, azúcar y huevo. Mientras que el cupcake se compone de Mantequilla y azúcar.
Un cupcake consta de 2 pilares inconfundibles:
-Bizcocho
En la elaboración del bizcocho del cupcake se usan exactamente los mismos ingredientes que utilizaríamos para elaborar una tarta común.
Esto permite que, del mismo modo que ocurre con las tartas, el bizcocho de los cupcakes puede ser de múltiples de sabores, desde los más comunes como chocolate, galletas...etc. Hasta sabores y combinaciones mucho menos frecuentes como Mohito, horchata, sabor a rosas...etc.
Además en su interior puede llevar chispas de chocolate e incluso relleno de cremas o mermeladas que ascienden a un nivel mayor la personalización de este postre.
-Buttercream
Es el nombre que recibe la crema superior de los cupcakes, realizadas a base de mantequilla tienen una similitud directa con la crema que encontramos en las tartas entre capa y capa de bizcocho y, del mismo modo que ocurre con el bizcocho del cupcake, no existen límites en cuanto a sabores se refiere.
La colocación de esta crema mediante manga pastelera y gracias al amplio mercado de boquillas de hoy en día hace que el acabado de cada cupcake sea completamente distinto al del anterior.
Además, esta crema puede servir de soporte para añadir medallas y figuras de fondant personalizados, lo que, con un poquito de creatividad, abre un mundo de posibilidades para este postre. Desde personajes para los más pequeños hasta elaboraciones para celebraciones de grandes empresas.
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4- INDIVIDUALIDAD
Como comentábamos, la posibilidad de añadir decoraciones de fondant o la personalización de la propia forma y posición de la crema hace que los cupcakes no solo se diferencien (y mucho) de las magdalenas sino que también hace que sean unos fuertísimos competidores de las tartas, ya que además de que con un poquito de arte pueden causar sensación, su individualidad hace que cada persona pueda escoger su sabor y diseño favorito.
Por ejemplo, una caja de cupcakes con temática fútbol a compartir con amigos. Como es lógico, no todos son del mismo equipo, por lo que CADA cupcake se personalizaría según el gusto de CADA amigo, así tu amigo del Madrid no se vería obligado a comerse el escudo de la Real Sociedad a regañadientes...
Con una tarta, en cambio, todas las porciones tienen una misma estética y un mismo sabor. (Y los madridistas no tienen escapatoria, aupa Real!)
5- CONJUNTO
Y del mismo modo, la misma posibilidad de crear cupcakes distintos entre sí permite la opción inversa, darles un conjunto que los hagan protagonistas en la mesa creando una imagen compuesta.
¡Finitto! Si tras toda esta recopilación de información sobre los cupcakes sigues pensando que tan sólo son una magdalena decorada, te invitamos a pasar por Oh! Sugar Dreams para que pruebes uno!
¡Para muestra un botón!